martes, 4 de enero de 2011


Quién puede apagar eso que al bailar descontrola tus caderas.




Quién puede domar la fuerza del mar
que se mete por tus venas,
lo caliente del sol que se te metió
y no te deja quieta nena.

Quién puede parar eso que al bailar
descontrola tus caderas
y ese fuego que quema por dentro
y lento te convierte en fiera.

La mano arriba, cintura sola.